[vc_row][vc_column][vc_column_text color=»#0a0a0a» font_size=»16px»]La endodoncia o tratamiento de canal consiste en extirpar el nervio del diente afectado por infección, ,trauma o para fines meramente protésicos; valiéndose de un instrumental especializado y remplazando la pulpa (nervio) por un material que deberá sellar por completo el conducto para mantenerlo libre de bacterias, por lo que al terminar el tratamiento los dientes se encuentran deshidratados haciéndolos vulnerables a fracturas si estos reciben fuertes cargas de oclusión o mordida y reduciendo la tasa de éxito.
Un diente después del tratamiento endodóntico deberá restaurarse adecuadamente para que de esta forma vuelva a tener buen pronóstico para realizar nuevamente su función y sea capaz de resistir fuerzas de masticación, por esto muchas veces el odontólogo utiliza técnicas y elementos accesorios como son: pernos de refuerzos, carillas y coronas para tratar de conservar el remanente coronario que queda después de un tratamiento de conducto.
Debemos de hacer saber que en ocasiones el diente endodonciado puede presentar dolor o enfermarse nuevamente, incluso años después de su tratamiento. Cuando esto ocurre, repetir el procedimiento de endodoncia puede salvar el diente.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
